El intendente Posse hablando en la ceremonia (arriba) y distinguiendo al suboficial Ramírez (abajo)
El intendente de San Isidro, Dr. Gustavo Posse, presidió ayer por la tarde el acto de celebración del Día de la Policía Federal, que como en ocasiones anteriores se realizó frente a la delegación local ubicada en Moreno 348, San Isidro.
Para referirse al acontecimiento el jefe comunal pronunció breves palabras que tendieron a resaltar la labor que cumple esa institución en el ámbito de su jurisdicción.
“Entiendo –dijo- que todos estamos en la búsqueda del bien común pero a veces los errores que se cometen se pagarán durante generaciones.”
“Quiero recalcar que todos no pueden ser policías. Aquellos signados por la vocación, por el llamado del deber deben tener el apoyo y la comprensión de la comunidad, así como esta debe sentirse protegida por la fuerza”, añadió.
“Debe entenderse el momento que se vive en que las causales sociales que da lugar a un estado de conflictividad que tiende a promover el quiebre de opinión de quienes estamos en la representación política. Sin embargo, esta situación no debe permitir que por debilidad tomemos decisiones erradas o nos induzcan a opiniones erradas que nos aparten del camino en la búsqueda del bien común”, subrayó.
“Quiero decirles que las causales, es cierto, en parte son sociales pero las leyes deben proteger al honesto, deben favorecer al policía que trabaja y deben cuidarlo a él y a su familia. Debemos hacer que las fuerzas existentes sean cada vez más importante, en número en tecnología, en el acceso a normativas que les permita ser más operativos y más resolutivos en cada uno de los delitos y delincuentes que enfrenta”, enfatizó Posse.
“Las veces que haya que cambiar, se debe hacerlo pensando que muchas veces no van a ser entendidos, pero su horizonte debe ser siempre el cuidado del bien común y entender que la ley debe ser áspera con el delincuente. Si no hay una diferencia en la disciplina para quienes deben ser castigados, es muy difícil ejercer la labor de policía”, resaltó luego el jefe comunal.
“Desde esa comprensión, desde quienes nos encontramos protegidos y cuidados por la labor ejercida por la policía federal en nuestro distrito, agradecemos su presencia y recordamos a todos los hombres y mujeres de la fuerza que dieron sus vidas en su lucha contra el delito”, concluyó Posse.
Previamente, habló el jefe de la delegación, comisario Carlos José Filgueiras, quien resaltó la labor cumplida por la repartición que conduce indicado que llegó al 97% de detenidos y remitidos a unidades carcelarias en la lucha contra el narcotráfico, revelando en consecuencia una mancomunada labor con la justicias federal y provincial.
Y dijo también que el esfuerzo que realiza la fuerza “deviene en estéril cuando una sociedad es incapaz de controlar los excesos de sus miembros”.
“A veces –dijo- nos cuesta desbrozar quienes por su acción u omisión propenden a favorecer los intereses del narcotráfico que a esta altura y, por su directa influencia, de los más aberrantes delitos no debe quedar la menor duda que nos enfrentamos a un enemigo poderoso, con un infinito poder de corrupción que, para contrarrestarlo no admite condescendencia ni debilidades morales por parte de ningún estamento de la sociedad. Más aún cuando se imparte justicia, se legisla un uniforme”.
Con la presencia de representaciones de fuerzas de seguridad, de la gendarmería, prefectura y bomberos voluntarios, el acto comenzó con la entonación del himno nacional y luego la recordación con un toque de diana, del cabo primero Ramón Orellana, muerto en el cumplimiento del deber.
A continuación fueron pronunciadas las palabras del intendente y del jefe de la delegación, para finalizar con la entrega de plaquetas y diplomas institucionales, bendecidos por el diácono de la catedral de San Isidro, José Hamed.
La distinción otorgada por la Municipalidad de San Isidro fue entregada por el Dr. Posse al suboficial auxiliar Francisco Ramírez, mientras el diploma de honor al mérito lo dio el comisario Filgueiras al subinspector Cristian Liendre.
Luego fueron distribuidas las siguientes distinciones: Premio Municipalidad de Tigre al agente Cristian Domínguez; reconocimientos por su desempeño en sus funciones a: sargento Félix Díaz, cabo primero Adrián Fortunato, agente Diego Gamarra, agente Rubén Enrique Munilla y agente Maximiliano Meyer; premio otorgado por el Jockey Club Argentino a la inspectora María Ramos y sargento José Luis Quiroga; premio ARCOR S.A. al sargento Omar González y cabo Santos Enrique Picarelli; premio Trilenium al sargento Claudio Raúl González y cabo primero Fabián Morena; premio Banco Patagonia al agente Emiliano López.
La ceremonia finalizó con la entrega por parte del 2º jefe de la delegación, subcomisario Marcelo González Guiachino, de una plaqueta al comisario Filgueiras en reconocimiento a su trayectoria por parte del personal de la delegación.
A su término, fue servido un vino de honor en las instalaciones de la delegación policial.
Para referirse al acontecimiento el jefe comunal pronunció breves palabras que tendieron a resaltar la labor que cumple esa institución en el ámbito de su jurisdicción.
“Entiendo –dijo- que todos estamos en la búsqueda del bien común pero a veces los errores que se cometen se pagarán durante generaciones.”
“Quiero recalcar que todos no pueden ser policías. Aquellos signados por la vocación, por el llamado del deber deben tener el apoyo y la comprensión de la comunidad, así como esta debe sentirse protegida por la fuerza”, añadió.
“Debe entenderse el momento que se vive en que las causales sociales que da lugar a un estado de conflictividad que tiende a promover el quiebre de opinión de quienes estamos en la representación política. Sin embargo, esta situación no debe permitir que por debilidad tomemos decisiones erradas o nos induzcan a opiniones erradas que nos aparten del camino en la búsqueda del bien común”, subrayó.
“Quiero decirles que las causales, es cierto, en parte son sociales pero las leyes deben proteger al honesto, deben favorecer al policía que trabaja y deben cuidarlo a él y a su familia. Debemos hacer que las fuerzas existentes sean cada vez más importante, en número en tecnología, en el acceso a normativas que les permita ser más operativos y más resolutivos en cada uno de los delitos y delincuentes que enfrenta”, enfatizó Posse.
“Las veces que haya que cambiar, se debe hacerlo pensando que muchas veces no van a ser entendidos, pero su horizonte debe ser siempre el cuidado del bien común y entender que la ley debe ser áspera con el delincuente. Si no hay una diferencia en la disciplina para quienes deben ser castigados, es muy difícil ejercer la labor de policía”, resaltó luego el jefe comunal.
“Desde esa comprensión, desde quienes nos encontramos protegidos y cuidados por la labor ejercida por la policía federal en nuestro distrito, agradecemos su presencia y recordamos a todos los hombres y mujeres de la fuerza que dieron sus vidas en su lucha contra el delito”, concluyó Posse.
Previamente, habló el jefe de la delegación, comisario Carlos José Filgueiras, quien resaltó la labor cumplida por la repartición que conduce indicado que llegó al 97% de detenidos y remitidos a unidades carcelarias en la lucha contra el narcotráfico, revelando en consecuencia una mancomunada labor con la justicias federal y provincial.
Y dijo también que el esfuerzo que realiza la fuerza “deviene en estéril cuando una sociedad es incapaz de controlar los excesos de sus miembros”.
“A veces –dijo- nos cuesta desbrozar quienes por su acción u omisión propenden a favorecer los intereses del narcotráfico que a esta altura y, por su directa influencia, de los más aberrantes delitos no debe quedar la menor duda que nos enfrentamos a un enemigo poderoso, con un infinito poder de corrupción que, para contrarrestarlo no admite condescendencia ni debilidades morales por parte de ningún estamento de la sociedad. Más aún cuando se imparte justicia, se legisla un uniforme”.
Con la presencia de representaciones de fuerzas de seguridad, de la gendarmería, prefectura y bomberos voluntarios, el acto comenzó con la entonación del himno nacional y luego la recordación con un toque de diana, del cabo primero Ramón Orellana, muerto en el cumplimiento del deber.
A continuación fueron pronunciadas las palabras del intendente y del jefe de la delegación, para finalizar con la entrega de plaquetas y diplomas institucionales, bendecidos por el diácono de la catedral de San Isidro, José Hamed.
La distinción otorgada por la Municipalidad de San Isidro fue entregada por el Dr. Posse al suboficial auxiliar Francisco Ramírez, mientras el diploma de honor al mérito lo dio el comisario Filgueiras al subinspector Cristian Liendre.
Luego fueron distribuidas las siguientes distinciones: Premio Municipalidad de Tigre al agente Cristian Domínguez; reconocimientos por su desempeño en sus funciones a: sargento Félix Díaz, cabo primero Adrián Fortunato, agente Diego Gamarra, agente Rubén Enrique Munilla y agente Maximiliano Meyer; premio otorgado por el Jockey Club Argentino a la inspectora María Ramos y sargento José Luis Quiroga; premio ARCOR S.A. al sargento Omar González y cabo Santos Enrique Picarelli; premio Trilenium al sargento Claudio Raúl González y cabo primero Fabián Morena; premio Banco Patagonia al agente Emiliano López.
La ceremonia finalizó con la entrega por parte del 2º jefe de la delegación, subcomisario Marcelo González Guiachino, de una plaqueta al comisario Filgueiras en reconocimiento a su trayectoria por parte del personal de la delegación.
A su término, fue servido un vino de honor en las instalaciones de la delegación policial.
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