Tres móviles del Programa Cuidado Comunitario de la Municipalidad de San Isidro, fueron los primeros en arribar anoche en auxilio de la familia tomada como rehén en su domicilio del barrio Las Lomas de San Isidro, cuya liberación finalizó esta madrugada con éxito y detenidos los 3 autores del ilícito, dos menores y un mayor de edad.
Según el acta oficial, a las 21 de ayer se recibió un llamado de auxilio desde el sistema *911, denunciando que tres malvivientes ingresaron a una vivienda de la calle Alsina 1231 con propósito de robo, manteniendo como rehenes a tres de sus ocupantes.
Se trataba de la vivienda ocupada por el matrimonio Temple y dos hijas. La menor tras lograr escapar había hecho el llamado.
Recibido el pedido de auxilio por el subjefe de Seguridad Distrital, capitán Carlos Castirena, de inmediato pidió la convergencia de patrulleros y personal policial hacia el lugar.
Según el acta oficial, a las 21 de ayer se recibió un llamado de auxilio desde el sistema *911, denunciando que tres malvivientes ingresaron a una vivienda de la calle Alsina 1231 con propósito de robo, manteniendo como rehenes a tres de sus ocupantes.
Se trataba de la vivienda ocupada por el matrimonio Temple y dos hijas. La menor tras lograr escapar había hecho el llamado.
Recibido el pedido de auxilio por el subjefe de Seguridad Distrital, capitán Carlos Castirena, de inmediato pidió la convergencia de patrulleros y personal policial hacia el lugar.
Los primeros en arribar fueron los móviles del programa Cuidado Comunitario N° 78 conducido por el inspector municipal de Tránsito Cristian Iriarte transportando al teniente Maximiliano Quiroga; el móvil N° 74 a cargo del inspector comunal Diego Machuca, acompañado del oficial Lazo de la Vega y el móvil N° 24 con el inspector municipal Hugo Rodríguez y el oficial Walter Giacone, además del patrullero tripulado por los sargentos Omar A. Meza y Luis Alcaraz.
El personal policial inicia un procedimiento de aproximación a través de los techos de una finca lindera, ingresando por una ventana superior de la vivienda tomada. En la confusión generada por la acción, logra escapar el dueño de casa y luego su hija Carolina.
Por entonces llega el jefe distrital inspector Adrián Luongo, quien mientras era solicitada la presencia del Grupo Halcón, desarmado y enfocado por luces artificiales tranquilizó a los delicuentes y a las dos únicas rehenes que quedaron a merced de los delincuentes.
Arribado el grupo Halcón y deliberado el Comité de Crisis que integró también la jueza de menores Dra. Ravera Godoy, se inició una negociación que culminó en la madrugada con la entrega de los malvivientes, siendo identificados como dos menores de 17 años residentes en el barrio La Cava y en sus proximidades (Tomkinson y Av. Rolón) y Pablo Benítez, también con domicilio en La Cava. En el lugar se secuestró un revolver Smith&Wesson calibre 11,25 que usaron para amedrentar a la familia.
En el episodio, sólo el dueño de casa sufrió algunas contusiones en la cabeza, que fue curado por personal del hospital Ciudad de Boulogne, convocado para asistir en la emergencia.
El personal policial inicia un procedimiento de aproximación a través de los techos de una finca lindera, ingresando por una ventana superior de la vivienda tomada. En la confusión generada por la acción, logra escapar el dueño de casa y luego su hija Carolina.
Por entonces llega el jefe distrital inspector Adrián Luongo, quien mientras era solicitada la presencia del Grupo Halcón, desarmado y enfocado por luces artificiales tranquilizó a los delicuentes y a las dos únicas rehenes que quedaron a merced de los delincuentes.
Arribado el grupo Halcón y deliberado el Comité de Crisis que integró también la jueza de menores Dra. Ravera Godoy, se inició una negociación que culminó en la madrugada con la entrega de los malvivientes, siendo identificados como dos menores de 17 años residentes en el barrio La Cava y en sus proximidades (Tomkinson y Av. Rolón) y Pablo Benítez, también con domicilio en La Cava. En el lugar se secuestró un revolver Smith&Wesson calibre 11,25 que usaron para amedrentar a la familia.
En el episodio, sólo el dueño de casa sufrió algunas contusiones en la cabeza, que fue curado por personal del hospital Ciudad de Boulogne, convocado para asistir en la emergencia.