Norberto Testorelli en su casa con su esposa Susana
Víctima de una enfermedad que lo obligó a estar internado en los últimos días, finalmente el pasado viernes 10 falleció a los 80 años, Norberto Testorelli, presidente de la Cámara de Comercio e Industria de San Isidro y miembro de una tradicional familia de comerciantes locales dedicada a la venta de joyas y relojes.
La partida de Testorelli es una gran pérdida para los sanisidrenses porque se trata de un hombre de bien, bondadoso, querido por todos y siempre dispuesto a ayudar y trabajar por la comunidad.
“Es un santo”, lo definió el intendente de San Isidro, Gustavo Posse, el día del velatorio. “Va a ser difícil no verlo más por San Isidro, siempre dispuesto a colaborar por la comunidad. Pero bueno, Dios sabe porque hace las cosas”, señaló el jefe comunal.
También presidente de la Asociación Hijos y Amigos de San Isidro, fue justamente el día del festejo por el 20 aniversario de esta entidad (el sábado 28 de marzo en la Sociedad Española) su última aparición pública.
Quizá sin saberlo fue la despedida de sus amistades, ya que esa noche se congregaron en ese festejo gran parte de las personas que él conocía y con las que tenía trato habitual.
Esta ya figura emblemática de San Isidro fue uno de los sucesores de uno de los comercios más antiguos del partido como es la joyería Testorelli.
El comercio fue fundado en 1887 por el suizo José Testorelli, quien en 1913 por pedido del entonces intendente Adrián Beccar Varela construyó el actual reloj floral de la Plaza Mitre.
Luego continuó al frente de la joyería su hijo también llamado José, padre de Norberto.
Después fue el propio Norberto quien se ocupó de dirigir el comercio en compañía de su inseparable esposa Susana Abriata, con quien tuvo tres hijos: Miriam, Fabián y Gladys.
Pese a que desde hace ya un tiempo la joyería es dirigida por su hijo Fabián, Norberto se ocupaba de atender a los clientes en el local de la calle 9 de Julio 466. Ahí mismo vivía Norberto junto a su esposa en una casa con un increíble jardín desde el cual se ve el edificio de la Biblioteca Popular y la Catedral.
Sin dudas, con la partida de Testorelli se va un verdadero enamorado de San Isidro, un destacado benefactor de su comunidad. Y que por esas casualidades de la vida nació un 15 de Mayo, día de San Isidro Labrador.
La partida de Testorelli es una gran pérdida para los sanisidrenses porque se trata de un hombre de bien, bondadoso, querido por todos y siempre dispuesto a ayudar y trabajar por la comunidad.
“Es un santo”, lo definió el intendente de San Isidro, Gustavo Posse, el día del velatorio. “Va a ser difícil no verlo más por San Isidro, siempre dispuesto a colaborar por la comunidad. Pero bueno, Dios sabe porque hace las cosas”, señaló el jefe comunal.
También presidente de la Asociación Hijos y Amigos de San Isidro, fue justamente el día del festejo por el 20 aniversario de esta entidad (el sábado 28 de marzo en la Sociedad Española) su última aparición pública.
Quizá sin saberlo fue la despedida de sus amistades, ya que esa noche se congregaron en ese festejo gran parte de las personas que él conocía y con las que tenía trato habitual.
Esta ya figura emblemática de San Isidro fue uno de los sucesores de uno de los comercios más antiguos del partido como es la joyería Testorelli.
El comercio fue fundado en 1887 por el suizo José Testorelli, quien en 1913 por pedido del entonces intendente Adrián Beccar Varela construyó el actual reloj floral de la Plaza Mitre.
Luego continuó al frente de la joyería su hijo también llamado José, padre de Norberto.
Después fue el propio Norberto quien se ocupó de dirigir el comercio en compañía de su inseparable esposa Susana Abriata, con quien tuvo tres hijos: Miriam, Fabián y Gladys.
Pese a que desde hace ya un tiempo la joyería es dirigida por su hijo Fabián, Norberto se ocupaba de atender a los clientes en el local de la calle 9 de Julio 466. Ahí mismo vivía Norberto junto a su esposa en una casa con un increíble jardín desde el cual se ve el edificio de la Biblioteca Popular y la Catedral.
Sin dudas, con la partida de Testorelli se va un verdadero enamorado de San Isidro, un destacado benefactor de su comunidad. Y que por esas casualidades de la vida nació un 15 de Mayo, día de San Isidro Labrador.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario