Con una serie de exhibiciones de la obra del director bilbaino Alex de la Iglesia, este miércoles 23, comenzará en el Teatro Municipal del Viejo Concejo, 9 de Julio 512, el ciclo “Grandes Directores”, organizado conjuntamente por la Dirección de Cultura de la Municipalidad de San Isidro, la Fundación Cinemateca Argentina, CAECID y la Oficina Cultural de la Embajada de España.
Definido como “Humor incorrecto con acento español”, hasta el sábado 26, todos los días a las 20,30 se proyectarán sucesivamente los films “Muerto de risa”, “La comunidad”, “800 balas” y Crimen ferpecto”. La entrada será libre y gratuita.-
Alejandro de la Iglesia Mendoza, más conocido como Álex de la Iglesia, es licenciado en filosofía por la Universidad de Deusto, ex dibujante de historietas, finalmente se convirtió director, productor y guionista de cine español, nacido en Bilbao, el 4 de diciembre de 1965.
Su primera película es la primera de este ciclo y es la historia de una pareja de cómicos que a fuerza de bofetadas y mofletes vibrantes se convierten en el mayor suceso de humor español de los años setenta.
Muertos de Risa fue estrenada en 1999, con Santiago Segura, El Gran Wyoming y Alex Angulo, en los papeles principales. Cuenta sobre un par de artistas que a fuerza de bofetadas y mofletes vibrantes, lograron convertirse en la mejor pareja cómica del humor español de los setenta. Su historia es, en cierto sentido, un poco la historia de todos. Admiración, celos, envidia, ultraviolencia y catarsis, son los componentes de este relato llevado magistralmente al cine por Alex de la Iglesia.Pero si Nino y Bruno llegaron a lo más alto fue porque alguien supo modelar su odio mutuo convirtiéndolo en abrasadora energía cómica: el manager, forjador de estrellas secretas, demiurgo del carrusel de la fama.
A su vez, La comunidad (2000), cuenta con las actuaciones de Carmen Maura, Emilio Gutiérrez Caba, Eduardo Antuña y Jesús Bonilla. Cuneta, en este caso la historia de una mujer cuarentona, que trabaja como vendedora de pisos para una agencia inmobiliaria. Tras encontrar 300 millones de pesetas escondidos en el departamento de un muerto, no le queda más remedio que enfrentarse a la ira de unos vecinos muy particulares, encabezada por un administrador sin escrúpulos. La comunidad lleva veinte años esperando la muerte del inquilino del ático, afortunado acertante de una quiniela cuyos beneficios se negaba a compartir con los demás. Humor negro, acción, suspenso y altas dosis de tragedia humana, tiene este relato.
En cuanto a 800 balas (data de 2003), es de señalar que Sancho Gracia, Ángel de Andrés, Carmen Maura y Eusebio Poncela integraron el elenco. En este filme de la Iglesia refleja a Texas Hollywood, un polvoriento poblado del Oeste donde hace ya décadas que no se ruedan películas. Allí malvive Julián, un veterano especialista de cine que está de vuelta de todo. A su lado trabajan otros marginados y nostálgicos sin remedio: el pistolero cobarde, el doble temerario, el jinete sin suerte, el dueño del poblado y, por qué no, media docena de gitanos disfrazados de indios. Todos ellos se ganan el sustento recreando patéticas escenas de acción para los escasos turistas que visitan la zona. Las existencias de estos pobres diablos darán un vuelco con la aparición de un niño que asegura ser nieto de Julián. Su madre, una ejecutiva agresiva, decide enfrentarse de una vez por todas a los fantasmas del pasado y las heridas mal cicatrizadas se combinarán con la especulación inmobiliaria en una tormenta tragicómica de imprevisibles consecuencias. ¿Serán suficientes 800 balas para defender una forma de vida basada en la más pura de las fantasías cinematográficas?
Alex de la Iglesia estrenó “Crimen ferpecto” en 2004. Los papeles principales están a cargo de Guillermo Toledo, Mónica Cervera y Luis Varela. Cuenta la historia de Rafael, tipo seductor y ambicioso. Le gustan las mujeres guapas, la ropa elegante y el ambiente selecto. Nació para vender y ha convertido la sección de Señoras de la tienda en la que trabaja en su feudo particular. Rafael aspira a convertirse en el nuevo Jefe de Planta.Su principal rival para ocupar el puesto es Don Antonio, el veterano encargado de la sección de Caballeros. Por fatalidades del destino, Don Antonio muere accidentalmente tras una discusión acalorada. El único testigo del crimen es Lourdes, una empleada horrorosa, naïf y obsesiva, que no duda en chantajear a Rafael para que se convierta en su amante, su marido y su esclavo. Rafael se desespera viendo cómo su mundo sofisticado degenera poco a poco en un infierno de vulgaridad. Preso de la locura, idea un plan infalible para librarse de Lourdes. Esta vez no puede permitirse ni un error. Todo tiene que ser “ferpecto”.
Definido como “Humor incorrecto con acento español”, hasta el sábado 26, todos los días a las 20,30 se proyectarán sucesivamente los films “Muerto de risa”, “La comunidad”, “800 balas” y Crimen ferpecto”. La entrada será libre y gratuita.-
Alejandro de la Iglesia Mendoza, más conocido como Álex de la Iglesia, es licenciado en filosofía por la Universidad de Deusto, ex dibujante de historietas, finalmente se convirtió director, productor y guionista de cine español, nacido en Bilbao, el 4 de diciembre de 1965.
Su primera película es la primera de este ciclo y es la historia de una pareja de cómicos que a fuerza de bofetadas y mofletes vibrantes se convierten en el mayor suceso de humor español de los años setenta.
Muertos de Risa fue estrenada en 1999, con Santiago Segura, El Gran Wyoming y Alex Angulo, en los papeles principales. Cuenta sobre un par de artistas que a fuerza de bofetadas y mofletes vibrantes, lograron convertirse en la mejor pareja cómica del humor español de los setenta. Su historia es, en cierto sentido, un poco la historia de todos. Admiración, celos, envidia, ultraviolencia y catarsis, son los componentes de este relato llevado magistralmente al cine por Alex de la Iglesia.Pero si Nino y Bruno llegaron a lo más alto fue porque alguien supo modelar su odio mutuo convirtiéndolo en abrasadora energía cómica: el manager, forjador de estrellas secretas, demiurgo del carrusel de la fama.
A su vez, La comunidad (2000), cuenta con las actuaciones de Carmen Maura, Emilio Gutiérrez Caba, Eduardo Antuña y Jesús Bonilla. Cuneta, en este caso la historia de una mujer cuarentona, que trabaja como vendedora de pisos para una agencia inmobiliaria. Tras encontrar 300 millones de pesetas escondidos en el departamento de un muerto, no le queda más remedio que enfrentarse a la ira de unos vecinos muy particulares, encabezada por un administrador sin escrúpulos. La comunidad lleva veinte años esperando la muerte del inquilino del ático, afortunado acertante de una quiniela cuyos beneficios se negaba a compartir con los demás. Humor negro, acción, suspenso y altas dosis de tragedia humana, tiene este relato.
En cuanto a 800 balas (data de 2003), es de señalar que Sancho Gracia, Ángel de Andrés, Carmen Maura y Eusebio Poncela integraron el elenco. En este filme de la Iglesia refleja a Texas Hollywood, un polvoriento poblado del Oeste donde hace ya décadas que no se ruedan películas. Allí malvive Julián, un veterano especialista de cine que está de vuelta de todo. A su lado trabajan otros marginados y nostálgicos sin remedio: el pistolero cobarde, el doble temerario, el jinete sin suerte, el dueño del poblado y, por qué no, media docena de gitanos disfrazados de indios. Todos ellos se ganan el sustento recreando patéticas escenas de acción para los escasos turistas que visitan la zona. Las existencias de estos pobres diablos darán un vuelco con la aparición de un niño que asegura ser nieto de Julián. Su madre, una ejecutiva agresiva, decide enfrentarse de una vez por todas a los fantasmas del pasado y las heridas mal cicatrizadas se combinarán con la especulación inmobiliaria en una tormenta tragicómica de imprevisibles consecuencias. ¿Serán suficientes 800 balas para defender una forma de vida basada en la más pura de las fantasías cinematográficas?
Alex de la Iglesia estrenó “Crimen ferpecto” en 2004. Los papeles principales están a cargo de Guillermo Toledo, Mónica Cervera y Luis Varela. Cuenta la historia de Rafael, tipo seductor y ambicioso. Le gustan las mujeres guapas, la ropa elegante y el ambiente selecto. Nació para vender y ha convertido la sección de Señoras de la tienda en la que trabaja en su feudo particular. Rafael aspira a convertirse en el nuevo Jefe de Planta.Su principal rival para ocupar el puesto es Don Antonio, el veterano encargado de la sección de Caballeros. Por fatalidades del destino, Don Antonio muere accidentalmente tras una discusión acalorada. El único testigo del crimen es Lourdes, una empleada horrorosa, naïf y obsesiva, que no duda en chantajear a Rafael para que se convierta en su amante, su marido y su esclavo. Rafael se desespera viendo cómo su mundo sofisticado degenera poco a poco en un infierno de vulgaridad. Preso de la locura, idea un plan infalible para librarse de Lourdes. Esta vez no puede permitirse ni un error. Todo tiene que ser “ferpecto”.
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