Más de cincuenta jinetes, la inmensa mayoría con ropas gauchescas, y numerosos carruajes, dieron pintoresco panorama a San Isidro el pasado sábado 1, cuando iniciaron la Travesía Peregrina que unió por primera San Isidro con el predio ferial de Palermo, donde se lleva a cabo la muestra "Nuestros Caballos".
Fue la decimoséptima travesía peregrina. Estas se iniciaron en 1990, uniendo Luján y San Nicolás. La iniciativa surgió de un grupo de amigos que salieron de Luján una vez y, sin saber muy bien por qué, el destino fue San Nicolás y la motivación fue religiosa. La única exigencia que fijaron es que participantes vayan montados o en carruajes y con el espíritu de nuestras tradiciones, es decir, con ropas gauchas.
De esta primera procesión que unió San Isidro con Palermo, participaron de granaderos, miembros de la policía montada y de la Gendarmería Nacional.La Caballería de la Travesía Peregrina Lujan San Nicolás sostiene que "lo mejor que puede pasarle a quien participe es volver un poco mejor con la asistencia de Nuestra Señora de Luján, patrona de la Argentina", dijo Miguel Amuchástegui, promotor de esta actividad.
Tal como fuera diagramado hubo un lugar de encuentro en el Bajo, marcha hacia la Catedral de San Isidro -donde el padre Máximo bendijo a los jinetes y dirigió una oración a la Virgen- y, finalmente el inicio de la travesía por la avenida del Libertador hacia Palermo.
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