Personal del Programa Cuidado Comunitario de la Municipalidad de San Isidro logró detener a un joven motoquero que portaba una importante cantidad de cocaína.
El hecho ocurrió cuando el capitán Ramón Oscar Martínez y el inspector Cristian Rivero, del móvil comunal 116, alertaron que una moto roja cruzó a gran velocidad por la intersección de Olazábal y Camino Real Morón, Boulogne trantando de poner la mayor distancia posible con el móvil comunitario.
El motoquero continuó su marcha, aún después de la voz de Alto Policía, por Camino Real Morón. 500 metros más adelante, en la calle Blandengues, producto de una mala maniobra, el conductor de la motocicleta cayó al pavimento e inmediatamente arrojó una bolsita de plástico pequeña a la vereda.
Enseguida, el conductor de la moto fue detenido e identificado como Gabriel Ernesto Aguirre, de 18 años, domiciliado en el distrito de Pilar. Acto seguido, con un vecino como testigo, se procedió a incautar la bolsa que había sido arrojada y que contenía siete envoltorios de nylon transparente.
El detenido fue derivado a la Comisaría 9ª (La Horqueta) donde, tras los análisis químicos de rigor, se confirmó que la sustancia incautada , un total de 7 “tizas” como se las denomina, se trataba de clorhidrato de cocaína, en una cantidad de 72,11 gramos.
El hecho ocurrió cuando el capitán Ramón Oscar Martínez y el inspector Cristian Rivero, del móvil comunal 116, alertaron que una moto roja cruzó a gran velocidad por la intersección de Olazábal y Camino Real Morón, Boulogne trantando de poner la mayor distancia posible con el móvil comunitario.
El motoquero continuó su marcha, aún después de la voz de Alto Policía, por Camino Real Morón. 500 metros más adelante, en la calle Blandengues, producto de una mala maniobra, el conductor de la motocicleta cayó al pavimento e inmediatamente arrojó una bolsita de plástico pequeña a la vereda.
Enseguida, el conductor de la moto fue detenido e identificado como Gabriel Ernesto Aguirre, de 18 años, domiciliado en el distrito de Pilar. Acto seguido, con un vecino como testigo, se procedió a incautar la bolsa que había sido arrojada y que contenía siete envoltorios de nylon transparente.
El detenido fue derivado a la Comisaría 9ª (La Horqueta) donde, tras los análisis químicos de rigor, se confirmó que la sustancia incautada , un total de 7 “tizas” como se las denomina, se trataba de clorhidrato de cocaína, en una cantidad de 72,11 gramos.
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